La obesidad es una enfermedad crónica(1), mutisistémica, proinflamatoria(2) y progresiva(3) cuya prevalencia se ha triplicado desde 1980. Si la tendencia actual continua, se espera que en 2030 un 60% de la población mundial sufra exceso de peso (sobrepeso u obesidad)(4).
Esta circunstancia supone un cambio demográfico que afecta al paciente candidato a cualquier tipo de cirugía y procedimiento anestésico, programado o urgente, por lo que resulta imperativo que los anestesiólogos se familiaricen con el manejo perioperatorio de los pacientes con exceso de peso(5,6).
El Grupo de Trabajo ‘Manejo Perioperatorio del Paciente con Obesidad’ tiene como finalidad implantar una ‘cultura bariátrica’ (entendiendo el término desde el punto de vista etimológico y no solamente quirúrgico)(7), incidiendo en el conocimiento de los cambios anatómicos y fisiopatológicos asociados a la obesidad, la estadificación de la gravedad de la misma, la correcta dosificación de fármacos, las implicaciones anestésico-quirúrgicas, la estimación del riesgo perioperatorio, las complicaciones más frecuentes y su prevención, los recursos materiales específicos recomendados, etc.
Todo ello desde la perspectiva de la seguridad del paciente y la calidad de la asistencia sanitaria.